Un año más decimos adiós a la Navidad con todos los niños y no tan niños ilusionados por la llegada de los Reyes Magos. Nosotros, después de dos semanas ofreciendo los mejores planes para disfrutar de estas fechas, también nos despedimos a lo grande.
Y para cerrar nuestras primeras navidades junto a vosotros hemos querido preguntar a todos aquellos que hayan visitado Madrid en esta época, cómo se lo han pasado y qué les ha parecido. Llegados desde todas las comunidades autónomas de España y desde el resto del mundo, los turistas han podido disfrutar, a pesar del frío, de todos los eventos típicos de la capital preparados para estos tiempos.
Los árboles, probablemente, habrán sido una de las cosas más fotografiadas en estas fiestas. Patricia González, que venía desde Soria para pasar unos días se daba cuenta de la iniciativa de la publicidad y lo achacaba a la “crisis”, aún así, nos dijo que le parecía una “gran iniciativa para poder adornar la ciudad y espera que algún día se pueda salir de ésta para disfrutar mejor estas fechas”.
Asimismo, las filas que la gente ha aguantado para entrar a los Nacimientos expuestos en los diferentes lugares de Madrid eran muy numerosas y en algunos de ellos, como el que había en Cibeles o en la puerta del Sol, hacían cola desde antes de las 9 de la mañana. Un matrimonio de jubilados de Cádiz reconoció que todos los años visitaban la ciudad en Navidad para poder ver uno de sus belenes.
Como ya dijimos en el video “especial de Navidad”, la Plaza Mayor es también un lugar de obligado paso para la Navidad madrileña, y un año más se llenó de puestos para que la gente pudiese hacer sus compras más navideñas. Así lo dejó claro Roberto Méndez, de Cantabria, que aunque nos dijo que su intención sólo era cotillear al final se compró el típico gorrito que lleva todo el mundo ahora, aunque “antes de hacerlo opinaba que eran feísimos”.
No todo fueron buenas críticas, Óscar Bermúdez, llegado desde Murcia, admitió que había demasiada gente por las calles de Madrid y que él prefiere unas navidades tranquilas, aunque también recalcó que el alumbrado del día 23 en Cibeles fue precioso.
Además, el día más internacional de todos, el 31 de diciembre, volvió a llenar la capital de personas que, o bien españoles que querían vivir las campanadas desde la misma plaza o bien extranjeros que querían conocer y disfrutar la tradición de las uvas. George vino desde Londres para tomarse las uvas y nos admitió que ya era el tercer año que lo hacía porque se lo pasaba genial. Pero, también es verdad que aquí hay diferentes posturas, y muchos de los que prueban no quieren repetir. A las 00:25 del día 1 de enero, cuando pudimos hablar con alguien después de las uvas, Rafael López, que venía desde Pamplona, nos dijo que una y no más, “la gente se tira botellas como locos y se dedican a ensuciar los trajes de los demás, prefiero verlo desde casa”, reconoció el joven navarro.
Aún así, un rato después aún había un grupo de personas celebrando la llegada del año en el centro de la plaza, mientras intentaban limpiarla. Ellos, la mayoría de otros países europeos, no tuvieron ninguna pega en acabar empapados de Champagne, porque “para eso habían venido”.
Nosotros estuvimos encantados de volver a vivir una Navidad en una de las mejores ciudad del mundo…
¡¡FELIZ DÍA DE REYES!!